No sé si moralmente se entenderá mi situación sentimental, y no es que ello me preocupe, al menos no hasta ahora. Pero claro, después de un tiempo, en que los conocidos no te preguntan por los cambios que notan en ti, porque dan por hecho que mantienes un rollo más o menos largo con alguien a quien quizás no le des más importancia, llega el momento de interrogarte para saber si eso va en serio o no, y quien es el.
He aquí mi dilema. No sé si entenderán que estoy con un hombre que casi me dobla en edad, y además está casado, que no divorciado, ni siquiera separado. Vamos, que soy su amante...